La perseverancia de Mauro Vale

 Estimado Frankenstein: 

Lamento mucho que usted tenga tan errónea imagen de los periodistas, y lamento mucho mas que haya sido catalogado como "demonio" por la humanidad. Tengo la intención no solo de que me enseñe su día a día para poder perseverar aquí, sino también de que la humanidad sepa quien es Frankenstein en verdad. Se que dentro suyo hay mucho mas que puros sentimientos de odio.

Debo advertirle que tengo un gran poder de perseverancia, y gracias a eso, no voy a parar hasta no concretar un encuentro con usted. Puedo asegurarle que nuestra reunión sera tan satisfactoria como lo es para usted una tarde con su amada novia.

Sinceramente Sr. Frankenstein en este mundo no tengo nada, todo lo he dejado en mi anterior residencia. No busco embellecer mi imagen y mucho menos aumentar un simple numero de rating, solo quiero que nos beneficiemos ambos con esta reunión, y que se sienta totalmente a gusto en mi compañía.

Reconsidere mi propuesta.

Saludos, Mauro.